Algunas personas creen que los retazos y subproductos de orígen animal crudos (tripas, vísceras, etc.) son la mejor opción cuando se trata de alimentar a su mascota. Piensan que es lo ideal debido a que es justamente lo que comían estos animales hace ya varios siglos.
Existen bolsas “preparadas” con huesos y retazos que han sido puestas a la venta en supermercados, pero ¿son realmente la mejor opción?
Nutrición no es lo mismo que alimentación
La alimentación consiste en satisfacer o saciar el hambre de un individuo, sin importar qué tipo de ingredientes contenga o de qué calidad sean. La nutrición, en cambio, consiste en satisfacer las necesidades nutricionales con base en una dieta balanceada.
No importa desde qué punto de vista se vea, la realidad es que los huesos son bastante peligrosos para los perros. Los veterinarios constantemente realizan cirugías para remover huesos (o fragmentos de hueso) que llegan a obstruir el tracto intestinal.
Los huesos frágiles, al ser masticados se rompen y se astillan, lo que puede provocar que estas astillas se entierren en el esófago o irriten seriamente el intestino. Debido a esto, existen sustitutos de estos huesos en el mercado que limpian los dientes y fortalecen las encías de tu perro.
Actualmente hay productos con hilos de nylon que actúan como hilo dnetal al ser masticados, eliminando los restos de comida de los dientes. Pregúntale a tu veterinario cual es la mejor opción para cumplir esta finalidad.
La cruda realidad
En lo concerniente a carnes crudas, muchos expertos en salud aseguran que las carnes que no han sido sometidas a un proceso de cocción adecuado pueden contener una cantidad considerable de bacterias que podrían provocar serios problemas no sólo al perro que los llegase a consumir, sino también a la persona que las maneja.
Nosotros, en lo personal, no recomendamos el uso de retazos o huesos como parte de la dieta precisamente por este contenido bacteriano que puede llegar a ser el causante de la muerte de tu mascota.
Algunas de estas bacterias pueden ser: E.coli, Salmonella, Clostridium, Shigella, Campylobacter y Listeria.
Todo está en el balance
Además de los puntos que hemos mencionado, otra cuestión importante acerca de los retazos es si de verdad nutren a tu perro. La gente no se da cuenta de que la nutrición es tan importante que, año con año, las compañías de alimento para perros gastan millones de dólares en investigaciones al respecto.
Tan sólo por este motivo, es muy poco probable que las necesidades nutricionales de tu perro sean llenadas con simples y llanos retazos día a día. Y para aquéllas personas que aseguran que debido a que los perros de hace varios siglos atrás se alimentaban con este mismo tipo de alimento, la explicación es la siguiente: un perro o lobo en estado salvaje se alimenta no solamente de ciertas partes de un pollo, ¡se come el pollo entero!, con esto, está alimentándose con los granos y vegetales que el pollo tenía en el estómago, con lo que obtendrá los aminoácidos que necesita.
Para las personas que crean que su perro puede ser alimentado con comida vegetariana exclusivamente, o incluso una comida casera a base de carne y arroz cocidos, sería bueno que pensaran si el perro está obteniendo la cantidad adecuada de vitaminas, minerales y nutrientes que necesita.
Un perro puede llegar a presentar anorexia, caída de pelo, anemia, problemas de la vista y hasta cardíacos asociados con una dieta inadecuada.
¿Qué es lo que debo darle entónces?
Lo mejor que puedes darle de comer a tu perro es un alimento comercial diseñado especialmente para su edad, peso, tamaño y condición física. Dale un alimento de alta calidad. Recuerda eso de que “lo barato sale caro”.
Te recomendamos cambiar a una marca de calidad premium o super-premium. Piénsalo así: si puedes conseguir un bulto de alimento en el supermercado por 50 pesos de una compañía que gasta billones de dólares en publicidad anualmente, ¿cuánto dinero crees que inviertan en la calidad del alimento?.
Si en cambio, eliges una marca de venta exclusiva en veterinarias, puedes estar seguro de que la calidad de ese alimento es inmensamente superior de la que se consigue en un supermercado.
Una cosa más: todas las compañías permiten que leas en la etiqueta la composición de los ingrediente, pero solamente las de mejor calidad permitirán que sepas la cantidad “utilizable” o digestible que hay en cada paquete. Elige el que tenga una mayor digestibilidad con los mejores ingredientes.
Y en lo que concierne a los retazos: JAMÁS SE LOS DES, punto.